He cometido muchos errores y he metido muchas
veces la pata, y sólo hay una cosa de la que he estado segura: de ti. Mírame,
no te estoy pidiendo nada. Cuando te digo que te quiero no es porque te desee
ni porque no pueda poseerte. No tiene nada que ver conmigo. Te quiero como
eres, lo que haces, cómo te esfuerzas... He visto tu bondad y tu fortaleza, he
visto lo mejor y lo peor de ti, y entiendo con total claridad quién eres
exactamente. Eres perfecto. Eres el único. ¿Y sabes? Te quiero. Y creo que el
mundo es un poco menos malo porque existes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario